La traducción del Nuevo Testamento ha sido abordada con una fidelidad esencial al pensamiento y estilo individual de los escritores bíblicos, similar a la aplicada en el Antiguo Testamento. Sin embargo, se han enfrentado a desafíos, especialmente al lidiar con peculiaridades literarias marcadas. Las limitadas vocabularios y las infelicidades estilísticas de los evangelistas, según los estándares occidentales, no pueden mantenerse exactamente como aparecen en los originales sin incomodar al oído moderno. Se busca un compromiso que conserve la simplicidad de la expresión de los evangelistas al servicio de su mensaje.
El Desafío de Juan y la Poesía Johannina
El Evangelio según Juan presenta un caso especial. La fidelidad absoluta a su técnica de frases reiteradas resultaría en un asalto al oído inglés, pero suavizar el efecto vocal mediante la sustitución de palabras y frases destruiría la efectividad de su poesía. Nuevamente, se recurre a un compromiso. Este equilibrio es delicado, especialmente cuando la repetitividad deliberada del autor puede ser percibida como un defecto estilístico por los lectores contemporáneos.
Retos en la Traducción de las Epístolas de Pablo
Las carencias sintácticas de Pablo, sus frecuentes deslices en el anacoluto, entre otros, se traducen tal como aparecen en sus epístolas en lugar de "suavizarlos". Este enfoque se mantiene incluso cuando la prosa original fluye más suavemente, como en Lucas, Hechos y Hebreos, donde se refleja en la traducción.
Consideraciones sobre el Texto Griego y la Revisión Continua
La traducción se basa principalmente en el texto griego de la tercera edición de The Greek New Testament. Se han seguido las pautas de Nestle-Aland. La revisión constante se justifica por la necesidad de ajustarse a los avances académicos y satisfacer las necesidades pastorales identificadas a través de la experiencia litúrgica.
Sensibilidad en la Traducción y Desafíos Actuales
La revisión muestra sensibilidad en cuestiones de discriminación en el lenguaje. Se reconoce el debate sobre expresiones antisemitas y posibles discriminaciones. La preocupación principal es la fidelidad al texto original, buscando inclusividad cuando el griego lo permite, evitando circunloquios innecesarios o neologismos.
Uso del Lenguaje Inclusivo y Desafíos del Adelphos Griego
La traducción aborda el desafío del término griego adelphos, que literalmente significa "hermanos". Aunque se adopta tradicionalmente como "hermanos", se mantiene con el significado inclusivo figurativo asignado por los primeros cristianos, reconociendo a todos los miembros de la comunidad cristiana, independientemente del género.
Revisión de 1978 y Experiencia Pastoral
La revisión de 1978 respondió a avances académicos y necesidades pastorales. Se formó un comité para dirigir la revisión, colaborando con académicos de otras iglesias cristianas. El proceso incluyó una minuciosa revisión de todos los materiales para garantizar precisión y coherencia.
Metas de la Revisión y Uso Contemporáneo
La revisión busca producir una versión precisa y fiel al significado del original griego. Se adopta un enfoque de equivalencia formal para emparejar vocabulario, estructura e incluso el orden de las palabras tanto como sea posible en el idioma receptor. Se pretende que la versión sea reconocida como discurso digno, en el nivel de uso formal más que coloquial.
Sensibilidad a la Diversidad y Retos Actuales
La revisión refleja la preocupación por la discriminación en el lenguaje, abordando cuestiones actuales. Se busca ser sensible a las críticas de expresiones anti-judías y de discriminación contra minorías. Sin embargo, se afirma que la traducción no introduce cambios para ajustarse a preocupaciones contemporáneas, manteniendo las formas tradicionales de hablar sobre Dios y Cristo.
Consideraciones Finales y Uso de la Nueva Traducción
La Nueva Biblia Americana, una traducción católica romana, ha ganado reconocimiento por su fidelidad al original y su adaptación al inglés americano contemporáneo. La revisión de 1986 mantiene los objetivos triples de ser adecuada para la proclamación litúrgica, la lectura privada y el estudio. Se espera que la traducción continúe siendo una herramienta valiosa para la comprensión del Nuevo Testamento y el crecimiento espiritual personal.
Con su enfoque en la fidelidad al texto original y la adaptación al uso contemporáneo, la Nueva Traducción del Nuevo Testamento ofrece una herramienta valiosa para aquellos que buscan sumergirse en las Escrituras. Su compromiso con la sensibilidad en el lenguaje y la revisión continua reflejan la dedicación a proporcionar una versión que resuene tanto en la liturgia como en la devoción personal.